6 de septiembre de 2012

La princesa está triste... ¿qué tendrá la princesa?

Permitidme que tome prestado este primer verso de la sonatina de Rubén Darío para hablar de un tema que me tiene loca. Como el culebrón no amaina he pensado que arremeter contra todo era lo mejor, dadas las circunstancias. 

Resulta que un tal Cristiano Ronaldo insinuó hace días que estaba triste, muy triste, y lejos de desvelar los motivos de su tristeza tiene en vilo a todo el periodismo deportivo y a todos los que leen esos periódicos mientras juega a las adivinanzas. ¿Es porque no te quieren? No. ¿Es porque quieres más dinero? No. ¿Fuiste famoso muy joven y ahora te arrepientes de tu juventud perdida? ¿Es porque la nueva equipación te parece espantosa? (añadir aquí más preguntas, a placer). Hasta los psicólogos empiezan a aventurar posibles razones de su tristeza

Lo único que justifica las declaraciones de este futbolista es un parón de quince días en la Liga. ¡Enorme problema! Con dos semanas de fútbol en blanco, ¿qué narices van a escribir los periódicos deportivos? 

Afortunadamente, buscando los principales periódicos de este tipo que conozco, me he dado cuenta de que tanto Marca como As dedican un par de entradas a la victoria de Contador, ayer, en la Vuelta a España, que deja casi sin opciones a sus rivales. También es noticia importante el Premio Príncipe de Asturias del Deporte a Casillas y Xavi (aunque me pregunto cuántas noticias se hubieran publicado sobre este premio si el galardonado fuera otro). 

Aun así, la cantidad de entradas relacionadas con el fútbol me hacen pensar si realmente estos periódicos están en un aprieto cuando no hay nada sobre lo que escribir, si los culebrones de los fichajes se montan a base de publicaciones, si el resto de deportistas no tiene razones para ofenderse cuando, tras diez minutos de noticias futbolísticas en el telediario, muchas de ellas de importancia cuestionable y solo colocadas ahí porque pertenecen a ese deporte, se hace una mención de cinco segundos a alguna de sus victorias antes de devolver la palabra al presentador de turno (y eso cuando tienen la suerte de ser nombrados). 

Esto empezó el domingo. Aún queda semana y media de conjeturas sin sentido

No hay comentarios:

Publicar un comentario